Como somos unos fanáticos de estas amargas verduritas, vamos a poneros otra receta, esta vez con los cuatro sabores básicos. Creo que son cinco pero el último es un poco rarito.
Ingredientes para dos personas:
- Tres endivias.
- Queso Edam Holandés cortado en dados pequeños.
- Cuatro cucharadas de mermelada de higos.
- Un chorrito de vino dulce. El Pedro Ximénez va estupendamente.
- Sésamo al gusto.
- Aceite de oliva virgen.
- Un chorrito de vinagre de manzana.
- Media granada grande.*
- Sal rosa del Himalaya.
¿Preparados? Se ponen las endivias en una fuente como si fueran una flor, se rocían con aceite de oliva en spray para que queden bien cubiertas. Mezclamos la mermelada con el vino dulce y las rellenamos. En cada hoja ponemos uno o dos dados del queso holandés y lo cubrimos con sésamo. Finalmente echamos un chorrito de vinagre para obtener el contraste deseado. Se hacen en un pis pas y están requetebuenas. Nosotros teníamos granada del día antes y decidimos poner también un poco por encima. Gran acierto: además de adornar, los granos de la granada dan frescor a la ensalada. UMMMM… hemos comido dos platos.
Como ya sabéis de las delicadas y sanas propiedades de las endivias, hoy os contaremos que los higos son muy ligeros porque contienen un fermento digestivo y un alto contenido en fibra que mejora el tránsito intestinal. Además aportan potasio, magnesio, calcio y vitaminas A, B1, B2, B3 y C. Contienen un 80% de agua e hidratos de carbono como sacarosa, fructosa y glucosa.
Nuestro Toque : hoy vamos a estrenar unos copos de sal con pimentón rosa que nos han regalado por navidad.
¿Sabíais que… la granada es un potente diurético por lo que resulta muy útil para las personas que necesitan eliminar líquidos?
La frase del día es de Manuel Vincent.
«Comerse un higo chumbo junto a una tapia encalada y saber íntimamente que el azar es una de las formas que adopta la luz del sol cada día, eso modela nuestra felicidad». Hala, a comer sano y a ser felices, con higuera o sin ella.