
Si bien tradicionalmente la menestra se hace con carne, nosotros hemos decidido hacer un giro y preparar una plato con toque especial de langostinos y salmón. Está deliciosa y es una fuente muy interesante de fibra, minerales y Omega tres
Ingredientes para cuatro personas:
Una rodaja de salmón.
10 langostinos.
Un brécol de unos 200 gramos.
Un bote de guisantes finos.
Un bote de alcachofas (ahora no es época).
Un diente de ajo.
Una lata pequeña de pimientos (si es fresco, uno pequeño).
Cuatro patatas.
Una cayena
Una cebolla pequeña.
Aceite de oliva virgen.
Sal y pimentón (opcional).
Un litro de caldo de verduras.
Procedemos:
Ponemos la cebolla y el ajo cortados finos en una una olla rápida con cuatro cucharaditas de aceite de oliva, pochamos y añadimos las cuatro patatas cortadas en dados. Rehogamos y añadimos el pimiento, el bote de alcachofas, el brécol cortado en ramilletes, la cayena y una cucharadita de pimentón.
Añadimos el litro de caldo, y cocemos unos diez minutos desde que sube.
En una sartén dejamos que el salmón se haga un poco a la plancha y mientras tanto pelamos los langostinos (los compramos ya cocidos).
Abrimos la olla y añadimos el salmón con los langostinos y dejamos unos seis minutos a fuego lento.
Y, ¡Voila! Tendremos un plato lleno de propiedades, sabroso y muy fácil de hacer.
Truco: si queréis que los guisantes estén más hidratados, ponerlos unos cinco minutos en agua después de haberles escurrido bien el líquido de la lata. Se nota la diferencia. Nosotros opcionalmente la servimos con medio huevo duro en cada plato.
Y recordaros que:
La menestra de verduras es un plato nutricionalmente completo que aporta fibra, vitaminas (A, C, K y del grupo B), minerales (potasio, magnesio, hierro) y antioxidantes. Sus propiedades incluyen la mejora del tránsito intestinal, el fortalecimiento del sistema inmunológico y la contribución a la saciedad y al control de peso debido a su bajo contenido en grasa y calorías.