No es la primera receta que hacemos con este pescado; el bacalao es muy sabroso y versátil y da mucho de si. Nos gusta cocinarlo de todas las maneras posible, eso si, que no falte el arroz de acompañamiento. Esta receta está sacada de un libro de cocina portugués y hemos sido fieles en un 90 por ciento.
Receta para cuatro personas.
1 Filete de bacalao de unos 750 gramos
2 cebollas y media cortadas en rodajas
1 litro de leche
Aceite para freír
1 bote de mayonesa de 250 gramos
500 gramos de patatas
Leche al gusto para el puré
1 cucharada sopera de mantequilla
Nuez moscada
Una pizca de sal
Pimienta negra
Aceitunas negras para decorar
Modo de preparación.
En nuestro caso, como era un lomo muy grueso, desalamos el bacalao 72 horas en la nevera y cambiamos el agua cada ocho horas.
En un cazo, sumergimos el bacalao en 1 litro de leche y lo dejamos hervir de 3 a 4 minutos. Retiramos el bacalao de la leche y lo dejamos enfriar. Reservamos la la leche para usarla luego.
Pelamos las patatas, las cocemos y, una vez cocidas, hacemos un puré con la mantequilla y parte de la leche, dándole el punto de sal, pimienta y una pizca de nuez moscada. Cuidado que no os quede demasiado espeso.
Cortamos las cebollas en rodajas finas, las pochamos y añadimos sal y pimienta. A continuación, añadimos un cucharón de la leche de cocción del bacalao. La cebolla debe estar blanca y suave. No dejéis que se dore.
Mientras se hace la cebolla troceamos el bacalao en láminas.
Preparamos una fuente de horno, colocamos el bacalao en el fondo y añadimos el puré de patatas, a cucharadas entre los trozos de bacalao y ponemos las cebollas pochadas entre los montones de puré.
Por ultimo, rellenamos una manga pastelera con mayonesa y la colocamos encima de las patatas haciendo líneas (deben quedar como una rejilla) . En nuestro caso, usamos una mayonesa de las que vienen en envase de plástico, con lo que la echamos directamente con el aplicador.
Agregamos las aceitunas negras y horneamos unos 45 minutos a 180ºC.
Fácil, sencillo y muy, muy rico.