Sopa de pescado con verduras al estilo de las Azores.

Esta sopa nos la ofrecieron en las Azores  y si bien pensábamos que se iba a parecer a nuestra sopa de pescado de siempre, recibimos una agradable sorpresa porque se parecía más a un pote con pescado.
Hemos hecho nuestra propia sopa inspirados en esta receta y le hemos dado nuestro “toque” peculiar. Nos encantó; queda un plato sencillo y fresco a la par que nutritivo. Ahí va para los amantes de las sopas portuguesas.

Ingredientes para seis personas:

  • Un buen trozo de congrio (200 g mínimo).
  • Seis hojas grandes de acelgas frescas.
  • Un ramo de apio para dar sabor.
  • Un dado de jengibre.
  • Cuatro patatas normales.
  • Seis zanahorias.
  • Aceite de oliva virgen.
  • Sal gruesa en escamas.
  • Caldo de pescado/verduras. (Un litro).

Ponemos en medio litro de agua el congrio hasta que esté hecho. Lo sacamos y lo dejamos enfriar. Troceamos las patatas y las zanahorias en cuadraditos y cortamos las acelgas finas. Para evitar encontrarnos con desagradables sorpresas, desmenuzamos el congrio un vez que esté templado para que no tenga espinas. Ponemos en el agua de cocción del congrio el medio litro de caldo, las zanahorias, las patatas, las acelgas, la rama de apio y el jengibre. Antes de poner a cocer ponemos un chorrito de aceite de oliva y la sal en escamas. Y,¡ tachín! tras un rato en la olla tendréis una sencilla y deliciosa sopa que no os cansaréis de comer. Cuando la sopa esté lista, retiramos el apio (podéis dejarlo si os gusta) y el jengibre. Añadimos el congrio que habíamos reservado. Para hacer esta receta hemos ido al mercado y comprado todas las verduras en una tienda ecológica. Cuando uno tiene tiempo es agradable dejarse caer por el mercado, ver la cantidad de puestos con productos frescos que tenemos la suerte de encontrar y llegar al hogar con ganas renovadas de hacer un plato que nos hayan servido tan lejos de casa.
Nuestro Toque especial: el pimentón picante de la Vera nos encanta; antes de servir podéis hacer un sofrito con ajo o espolvorear un poco antes de servir. UMMMMMMMMM

Frase del día:  “Roncar es tomar ruidosamente sopa de sueño”

                                                         Ramón Gómez de la Serna




Calabaza a la plancha en ensalada templada de boquerones.

En este plato os mostramos un curioso contraste de sabores. La calabaza le da un toque más bien dulce, los boquerones aportan el punto ácido del vinagre, la lechuga hoja de roble suavidad y frescor y los piñones el toque crujiente. Esta es una ensalada que no decepcionará a los más exigentes.
Asegurado.
Ingredientes para cuatro personas:

  • 250 g de calabaza.
  • Una lechuga Hoja de Roble.
  • 100 g de boquerones en vinagre.
  • Aceite de oliva virgen extra.
  • Sal del Himalaya.
  • Dos cucharaditas de piñones.
  • Un chorrito de vinagre balsámico (nosotros tenemos uno con sabor a higo que es estupendo).

Ahora, manos a la masa. Se corta la calabaza en lonchas muy finas y rectangulares y se pone a la plancha con los piñones y un poco de aceite. Aparte aliñamos la lechuga con un chorrito de aceite, el vinagre balsámico y la sal. Añadimos la calabaza templada y los piñones y adornamos con los boquerones. ¿Puede algo ser más simple, rápido y rico? Animaros que todavía estamos en tiempo de calabazas.

Frase del día.

Como hoy nos sentimos profundos, os ponemos un haiku japonés.
Cien calabazas diferentes,
desde las entrañas
de una misma enredadera.
Chiyo-ni

Croquetas de bacalao, pasas y piñones.

Nuestra siguiente receta atrevida tiene una mezcla de sabores que cautivará a paladares tradicionales con ganas de salirse de lo normal y a los kamizaces de sabores distintos. A nosotros nos parecen súper originales y muy convenientes para romper con la croqueta de jamón de toda la vida y buscar nuevos horizontes. Ahí van los ingredientes.

Ingredientes para cuatro personas (dos por cabeza).

  • 200 g de bacalao en migas.
  • Una cebolla.
  • Un diente de ajo.
  • 100 g de harina.
  • Un litro de leche.
  • 100 g de mantequilla.
  • Un puñado de pasas.
  • 50 gramos de piñones.
  • Sal rosa del Himalaya.
  • Harina, dos huevos batidos y pan rallado para rebozar.

A ello. Picamos la cebolla y la pochamos en la sartén con un poco de aceite. Cortamos los dientes de ajo muy finos y los añadimos; entonces ponemos el bacalao y los piñones y los rehogamos unos minutos. Añadimos la harina y la tostamos. Vertemos la leche muy despacio sin dejar de remover. Ponemos sal a discreción y cocinamos a fuego lento durante veinte minutos sin parar de remover. Cuando la bechamel esté casi hecha, añadimos las pasas y las vamos mezclando bien. Pasamos la besamel a una fuente y la cubrimos con papel de plástico por encima (pegado a la besamel), para que no haga costra. Cuando la masa esté fría, la metemos a la nevera y la dejamos, al menos, una noche. La sacamos y hacemos unas bolitas, las pasamos por harina, huevo batido y pan rallado y las freímos con abundante aceite caliente. Cuando las saquemos de la sartén las ponemos en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. Y… servimos al instante.

Normalmente ponemos recetas rápidas y prácticas y muchos pensaréis que las croquetas son engorrosas de hacer. Eso es porque todavía no habéis probado estas delicias, esta mezcla de salado, dulce y fruto seco que os entusiasmará y sorprenderá a partes iguales. Una vez que las probéis seguro que sucumbís al efecto Súper Croqueta.

Nuestro Toque: si os gusta el perejil, podéis añadir a la besamel unas hojas picadas muy finas.

Frase del día: 

«Ya no se dirá: ‘Voy a ser el rey de las croquetas, si no ‘Voy a hacer las mejores'»
                                                                                              Joaquín Lorente

Mejillones a la colorá.

Este es un plato con mucho sabor a mar y con un punto picante que quita el sentido. Si os apetece sentir que estáis en un puerto pesquero en un día de verano con una brisa suave… este es el  guiso perfecto para un día gris de invierno.

Ingredientes para cuatro personas:

  • Un kilo de mejillones.
  • Un bote grande de cristal de salsa de tomate de la buena.
  • Un vaso de caldo de pescado.
  • Vino blanco.
  • Un diente de ajo grande.
  • Dos guindillas .
  • Cuatro langostinos.
  • Dos patatas grandes.
  • Sal gorda.
  • Aceite de oliva Virgen.
  • Un poco de perejil.

¿Preparados? Limpiamos los mejillones y los ponemos a cocer con un poco de agua hasta que se abran. Los apartamos y reservamos el agua de cocción (bien colada). En una olla (mejor si es rápida) ponemos el ajo picado muy fino, las dos guindillas cayenas y las patatas cortadas en cuadraditos. Freímos todo a fuego lento (aquí ponemos el perejil muy picado). Echamos en un cazo la salsa de tomate, el caldo y el vino blanco y dejamos que hierva unos minutos. Ponemos esta salsa con las patatas ya fritas y los mejillones y añadimos el agua de cocción de los mejillones que nos parezca apropiado, según nos guste la salsa más o menos espesa. Añadimos los langostinos y en dos minutos en la olla rápida ya tenemos el guiso. Probar que esté al punto de sal y a comer… Estos mejillones son ideales para los días de invierno que nos apetece entrar en calor después de venir del trabajo cansados y con mucha hambre.

Nuestro Toque: si os apetece innovar, podéis añadir almejas,  pulpo o calamares. Nuestra intención es que el mejillón sea la estrella de este plato, pero cada uno puede dejar volar su imaginación. Nosotros esta vez utilizamos pisto en vez de salsa de tomate, por eso veréis en la foto alguna verdurita.

Frase del día. Ponemos una adivinanza marinera a cerca de nuestro protagonista de hoy.
«En dos castañuelas voy encerrado y al sacarme del mar me pongo colorado‭»

Arroz bomba a la latina con toque de aceite de trufa.

Hola queridos seguidores. Hemos estamos muy ocupados pero al fin estamos de vuelta con nuestras súper recetas fáciles y sanas.
Hoy traemos arroz a la latina. Como siempre Rico y Sano.

Ingredientes:

  • Arroz bomba.
  • Una lata de caviar de oricios.
  • Una lata de pulpo en aceite de oliva.
  • Sal del Himalaya, una cayena y un chorro de vino blanco.
  • Aceite en spray de trufa. 
  • Una hojitas de menta o perejil.
  • Un diente de ajo.

Este arroz no es como una paella que apetece poner como plato único. Nosotros lo hacemos en cantidades pequeñas de primer plato porque tiene un sabor intenso y es mejor saborearlo en pequeñas dosis. Tiene un sabor a mar estupendo y el toque de trufa… ¡delicioso! Preparación: Nos gusta el arroz bomba porque es un arroz consistente de grano grande que da muy buen resultado. Ya sabéis la receta del arroz normal, una medida de arroz, dos de agua. Con este seguimos esa medida estándar. En un poco de aceite de oliva sofreímos el ajo picado muy fino y añadimos una cayena y el arroz. Revolvemos con la cuchara de madera y tras un minuto añadimos el agua (mejor caliente), los oricios, el pulpo, el chorrito de vino blanco y dejamos a fuego lento unos veinte minutos. Es muy importante que las latas sean de muy buena calidad, un pulpo en aceite de girasol no sería conveniente para que el plato tenga ese exquisito sabor mediterráneo. Cuando esté el arroz, dejáis reposar cinco minutos y antes de servir lo rociáis con el aceite de trufa y adornáis con el perejil.

Toque Rico: Si os gustan los champiñones, podéis añadirlos picados muy finos al gusto

Este plato queda perfecto acompañado de una ensalada con tomate, espárragos, huevo duro y vuestra lechuga favorita. El arroz tiene un sabor fuerte pero es fácil de digerir y con la ensalada y un buen plato de fresas, quedáis bien alimentados y felices para el resto del día.

Propiedades de los oricios:
Los oricios o erizos de mar destacan desde un punto de vista nutricional por su gran contenido en proteínas de buena calidad, además su contenido en grasas es muy bajo. También aportan muchos minerales (yodo, hierro y fósforo principalmente).

Frase del día:
“El tomar este marisco no es comer ni beber, sino respirar un pleno océano”
                                                                                   Julio Camba

Plato para camicaces de los sabores: Arroz rojo con fritos de rape.

Como ya habréis observado nos encantan las novedades y probar sabores distintos y creo que se nos esta potenciando según pasan los meses. Este plato que os ofrecemos hoy puede resultar un poco peculiar, pero si en vuestras intenciones culinarias está romper la rutina de vez en cuando, seguir leyendo…

Receta para dos personas:

  • Un puñado de setas secas (Rebozuelos en este caso).
  • 150 g de arroz rojo.
  • Medio litro de caldo de pescado bueno (menos de medio litro, si no lo queréis caldoso).
  • 400 g de rape cortado en trozos pequeños.
  • Un poco de miel.
  • Salsa de soja.
  • Una pizca de sal.
  • 50 g de almendras picadas finas.
  • Harina, puede ser cualquier tipo de harina sin gluten.
  • Huevos.
  • Aceite de oliva normal (para freír no lo utilizamos virgen).

Lo primero que tenéis que hacer es poner las setas Rebozuelos en agua caliente para que vayan esponjándose y el pescado a macerar en la miel mezclada con la salsa de soja. Media hora más tarde os ponéis manos a la obra. El arroz rojo no es algo que uno suela probar en restaurantes ni hacer en casa porque lleva un tiempo de cocción muy larga. Pero como hay fines de semana que uno tiene ganas de dedicarle más tiempo a la cocina y a hacer experimentos, pues lo dejáis para un día de lluvia o que os apetezca cocinar. El arroz se pone a cocer con el caldo durante ¡45! minutos, si lo dejáis menos tiempo queda al dente y si lo dejáis más se pasa, así que vais probando hasta encontrar el punto que consideréis oportuno. Cuando empiece a hervir el caldo del arroz, añadís las setas, una pizca de sal y esperáis a los últimos cinco minutos para poner las almendras. Aparte, vais preparando el pescado (que ya habrá cogido un sabor agridulce muy bueno). Pasáis los trozos por huevo y los rebozáis en harina sin gluten, nosotros a veces utilizamos de castañas, de trigo sarraceno o de garbanzos. Luego los freís en aceite muy caliente hasta que esté dorados. Eso hará que. Cuando los fritos estén listos, los ponéis encima de papel de cocina para que suelten el aceite que sobra y… todo al plato. Aunque penséis que la miel puede ser un elemento extraño, le da un sabor muy rico. Nos gustan mucho los contrastes, y este es perfecto. Así que asociar la miel a platos dulces es cerrar puertas a nuevos sabores que os pueden transportar a otros países y culturas. Forma de presentación. Los fritos van en el medio con un poco de perejil o albahaca en el centro y alrededor hacéis una corona con el arroz. Bon appetit!!!

Nuestro toque: Nos hemos aficionado a la albahaca y a la menta; a veces se pone para adornar, pero nosotros lo comemos, da un sabor fresco y riquísimo.

Propiedades del arroz rojo: Además de ayudar a bajar el colesterol malo, el consumo de arroz rojo colabora con el aumento del colesterol bueno. Otras propiedades son:

  • Es rico en fibra:Al conservar una capa de si piel contiene más fibra dietética que el arroz blanco. Al mismo tiempo que también tiene carbohidratos complejos, buenos para la salud, a diferencia de los simples que contiene el arroz blanco.
  • Buena fuente de hierro y magnesio: tu cuerpo podrá producir más energía, además de antioxidantes para proteger al cuerpo de los radicales libres.
  • Rico en zinc: El zinc colabora en la aceleración de la curación de heridas y mantenimiento del sistema inmunológico.
  • Alto contenido en vitamina B6.
  • Mejora los niveles de azúcar en sangre: Al tener un índice glucémico bajo, tiene efecto regulador de los niveles de azúcar en sangre y en la producción de insulina.

¿Sabías qué…?
En excavaciones egipcias de más de 200 años se encontraron vasijas con miel intactas, que sólo hacía falta calentar para poder comer…

Frase de hoy:

Congritako (Marmitako de congrio)

Hola Ricofans, este fin de semana hemos preparado un plato multiusos; es decir que si lo preparáis de una forma  queda de una manera y si lo preparáis de otra forma, queda de manera completamente distinta.

Ahí va  el secreto:
Ingredientes para dos personas.

  • Un trozo de congrio.
  • Dos patatas grandes.
  • Dos vasos de caldo de pescado.
  • Una lata de guisantes finos.
  • Media lata de pimientos o si prefería medio pimiento rojo natural sin piel.
  • Una cebolla grande.
  • Un ajo.
  • Aceite de oliva virgen.
  • Sal del Himalaya.
  • Un poco de cúrcuma.
  • Una cucharada de mostaza con miel.
  • Tres hojitas de albahaca fresca para decorar.

Se cortan las patatas en dados pequeños, se lavan bien y se ponen en la olla rápida. Se añade la cebolla y el ajo picados finos, los guisantes y el pimiento, se sofríe todo con dos cucharadas de aceite de oliva y se pone la sal y la cúrcuma. Después añadís los dos vasos de caldo y ponéis el congrio encima. Se cierra la olla y en unos minutos tenéis el congrio listo.
Ahora sacáis el congrio y  cuando haya enfriado, le quitáis bien las espinas, lo desmenuzáis y lo añadís al guiso. Os quedará un plato de cuchara súper rico y nutritivo. Si ponéis unas croquetas de mijo de entremés tendréis un menú de lo más sabroso y fácil de preparar.

Como ya os hemos hablado del pescado y lo buenísimo que es, hoy os vamos a hablar de los guisantes. Los guisantes, al igual que otras legumbres, ayudan a mejorar la circulación y la salud del corazón. Igualmente se ha comprobado que los guisantes son capaces de disminuir el «colesterol malo» de la sangre.
Además los guisantes, al igual que el resto de las legumbres, son una fuente muy adecuada de proteínas vegetales. Esto los hace ideales en dietas vegetarianas, ya que las proteínas son fundamentales en el desarrollo y renovación celular. Nuestro Toque Rico y Sano: si escogéis la primera opción podéis adornarlo con tres tomatitos cherry y unas rodajas de limón. Si escogéis el guiso,como no, ponerle un poco de cayena, que siempre se agradece.

¿Sabíais qué… después de las angulas y de las anguilas, el congrio es el pescado que más vitamina A contiene? Entre muchas otras funciones, esta vitamina protege los tejidos con mucosa, favorece la resistencia frente a las infecciones y mejora la visión nocturna.

Frase del día: hay un refrán español que dice: 
 «Si vas a la plaza, niña te advierto, la merluza cerrada y el congrio abierto».

Quinoa picantona con atún, pimiento rojo y pistachos.

Si no conocéis la quinoa este es el momento de probarla. Aporta un sabor
distinto a los platos de siempre, es digestiva y se cocina tan rápido como el
arroz. Os proponemos un plato distinto que seguramente os apetezca repetir con otros ingredientes. Y si tenéis invitados deseosos de novedades, este es el momento de ampliar horizontes.
Ahí va…

Ingredientes para 4 personas:

Una taza de quinoa.

Un diente de ajo.

Dos cebollas chalotas (son más suaves que las otras).

Una cayena.

Una lata de atún.

Aceite de oliva virgen extra.

Medio pimiento rojo.

Una zanahoria grande.

Media cucharita de cúrcuma.

Un poco de pimienta negra.

Un puñado de pistachos .

La quinoa se cuece en agua, como el arroz. Antes de ponerla en el agua la lavamos en un colador para que desaparezcan las saponinas que tienen las semillas y que le pueden dar un sabor amargo.  Ponemos la quinoa en una cazuela con un poco de sal y aproximadamente el doble de agua. En quince o veinte minutos está.
Aparte freímos en trozos muy finos el ajo, la chalota, el pimiento en trocitos y la zanahoria en dados; cuando esté todo dorado añadimos la cayena y finalmente la lata de atún y un chorrito de salsa Perrins. Los pistachos los reservamos para antes de servir.
Cuando la quinoa esté lista (ya habrá absorbido todo el agua) la mezclamos con todo lo demás en la sartén y añadimos un poco de cúrcuma y de pimienta negra.
Este plato es muy digestivo y muy rico y nos sirve para romper la rutina de cocinar siempre las mismas cosas.

Y..ahora…tachán!!! LA QUINOA: La quinoa es una semilla con características únicas porque se puede consumir como un cereal, por eso también se llama pseudo cereal. Si comparamos la quinoa con la mayor parte de los cereales, ésta contiene muchas más proteínas y grasas, aunque éstas últimas son en su mayoría insaturadas, con  ácidos omega 6 y omega 3. La quinoa tiene muchos minerales entre los que destaca el potasio, magnesio, calcio, fósforo, hierro y zinc , mientras que también ofrece vitaminas del complejo B en cantidades apreciables y vitamina E con función antioxidante. Además no contiene GLUTEN.
Así mismo, por su alto contenido en fibra y su mayor aporte proteico respecto a los cereales, la quinoa tiene un bajo índice glucémico, lo que la vuelve ideal para personas con diabetes o que desean adelgazar comiendo sano. También es de gran ayuda para controlar los niveles de colesterol en sangre, ya que su fibra y sus lípidos insaturados son muy buenos para el organismo. La quinoa también contribuye a evitar el estreñimiento, y puede ser de gran utilidad en la dieta de personas vegetarianas, por su elevada proporción de proteínas y de hierro de origen vegetal.
¿No es una buena razón para intentar un plato distinto? Si lo hacéis seguro
que repetís porque es un plato de fácil absorción y muy versátil. Lo mismo le podéis poner carne, que marisco o verduritas…

Nuestro Toque : veréis en la foto que hemos puesto unas gambas. Decoran y contrastan los sabores, si además exprimís un poco de lima o limón  por encima le de un sabor súper refrescante.

¿Sabíais que… los pistachos son ricos en potasio, magnesio, fósforo, hierro, cobre, manganeso, zinc , selenio y en vitaminas del grupo B?

 Frase de hoy:

Arroz con chipirones y champiñones Portobello.

Este plato está de un sabrosón impresionante. Dejaros seducir por la mezcla del chipirón y el champiñón, ya veréis que bueno.
Ingredientes para dos personas:

  • 150gr de champiñones Portobello.
  • 100 gr de arroz Basmati.
  • Medio kilo de chipirones.
  • Un diente de ajo.
  • Un tomate maduro.
  • Dos tazas de caldo de pescado bueno.
  • Un pimiento del piquillo.
  • Unas hebras de azafrán.
  • Aceite de oliva virgen.
  • Sal rosa del Himalaya.

En una sartén grande freímos los chipirones cortados en trocitos. En otra sartén ponemos el pimiento, el ajo y los champiñones; cuando ya estén salteados, añadimos el tomate cortado en dados y las hebras de azafrán tostadas y rehogamos unos minutos para que se mezclen los sabores.
Lo ponemos todo junto en la primera sartén, añadimos el arroz (previamente lavado durante un buen rato para eliminar el almidón y que los granos queden más ligeros y sueltos) un poco de sal  y las dos tazas de caldo de pescado. Dejamos que se vaya haciendo lentamente y en unos veinte  minutos veremos y oleremos el resultado. Ponemos una tapa en la sartén y lo dejamos reposar otros cinco minutos. Y al plato. ¡QUE RICOOOOOOOOOOOOOO!

Nuestro Toque : un chorrito de vino blanco para los forofos y por supuesto una guindilla.

El arroz Basmati hace el plato más ligero que otros tipos de arroz, así que con una ensaladita de entremés y este plato quedareis como reyes. No os arrepentiréis.

Beneficios nutricionales del arroz Basmati o arroz aromático: Hidratos de carbono: aporta hidratos de carbono complejos, que suministran energía pero de manera progresiva, no rápidamente como sí ocurre con los hidratos de carbono simples. 100 gramos de arroz Basmati aportan 45 gramos de carbohidratos. Proteínas: 100 gramos de arroz Basmati aportan el 10% de la dosis diaria recomendada; además, aporta 8 aminoácidos esenciales. Vitaminas: destaca su altísimo contenido en vitaminas del grupo B (sobretodo B1, B3 y B6, además de B2 y B9). También aporta vitamina K. Minerales: interesante aporte en manganeso, magnesio, selenio, hierro, calcio, potasio, cobre y zinc.
Así que ya sabéis, el mundo está lleno de alimentos que no probamos por pereza o por hábito, pero una vez que uno se lanza a probar cosas nuevas, no hay stop posible.

¿Sabíais que… Las hebras de azafrán son los estigmas de la flor de la rosa del azafrán? Es la especia más cara del mercado por la dificultad de su recolección.

Y ahora una frase Zen a la par que enigmática: «Después de la cosecha de arroz el espantapájaros no es el mismo».                                              Yosa Busón (Poeta japonés del siglo dieciocho)

Dorada a la crema de trufa

Somos grandes aficionados al pescado al horno y a la plancha. Este plato está requetebueno y es muy fácil y rápido de hacer, así que animaros que en casi todas las pescaderías limpian el pescado y lo único que necesitáis es…

Ingredientes para dos/tres personas:

  • Una dorada más bien grande.
  • Cuatro patatas cocidas pequeñas.
  • Un tomate.
  • Aceite de oliva virgen.
  • Vinagre.
  • Sal del Himalaya.
  • Perejil fresco.
  • Pimienta negra.
  • Medio limón.
  • Una cayena pequeña.
  • Crema de trufa.
  • Tomate seco triturado.

Pedís la dorada para poner a la espalda; una vez lavada y adobada con la sal y la pimienta, la ponéis en una fuente. Cuando las patatas estén cocidas  y enfriadas, las cortáis en rodajas mas bien gruesas y las rehogáis en  la sartén con un poco de aceite de oliva y una cayena pequeña. Lo ponéis todo junto en la fuente y al horno hasta que esté listo. Aparte cortáis un tomate pelado en dados muy finos  y lo aliñáis con el aceite, el vinagre y  la sal. 
El pescado fresco no necesita muchos aditamentos para que esté muy bueno, al contrario, esta receta demuestra que cuanto más sencillo mejor sabe, porque su sabor no está disfrazado con salsa ni cremas como hacen en algunos sitios cuando el pescado no está muy fresco o está  congelado. Se sirve la Dorada en la propia fuente (encima de un salvamanteles) y se pone al lado el tomate en un cuenco. Podéis decorarla con perejil fresco que es una gran fuente de vitamina C y una rodajas de limón. Encima de las patatas repartimos la cantidad de crema de trufa que nos parezca conveniente.
Antes de servir espolvorear con el tomate seco triturado.

Nuestro Toque : si añadís un poco de ajo antes de meter el pescado en el horno le daréis el toque rico rico. A los poco amantes del picante, cuidado con la cayena, aunque sean pequeñas son muy peleonas y al freírlas se potencia el picante. Ummmmmmm.

El pescado es un alimento que no puede faltar en nuestra dieta si queremos que sea súper sana. La dorada es un pescado ligerísimo que, además de ser bajo en grasa, tiene  muy pocas calorías, muchas proteínas, vitaminas del grupo B y minerales como el fósforo, calcio o yodo. Así que no os olvidéis, según los últimos estudios sobre nutrición es conveniente comer pescado al menos tres o cuatro veces por semana. Esto se debe a su riqueza en proteínas y Omega 3.
Algunos de los beneficios del Omega 3 son:

  • Disminuye los niveles de triglicéridos y colesterol.
  • Previene la formación de coágulos en las arterias al impedir la agregación plaquetaria.
  • Fluidifica la sangre y protege al cuerpo de ataques cardíacos, apoplejías, derrames cerebrales, anginas de pecho, mala circulación, etc.
  • Incrementa las transmisiones eléctricas del corazón por lo que regulariza el ritmo cardíaco.

¿Sabíais que…el perejil actúa como diurético además de tener grandes cantidades de fósforo, calcio, hierro y azufre?

Frase del día: Mirad que inspiradora…