Podéis pensar que este desayuno/merienda va a ser insípido o aburrido. Noooooo, comer sin azúcar y sin harinas es una opción muy sana, sobre todo para aquellos que quieren reducir ese chute mañanero de glucosa. Si alguien lo quiere probar con una cucharadita de estevia o azúcar morena, adelante, cocinar consiste en probar cosas nuevas y disfrutarlas, no en sufrir comiendo cosas con pocas ganas.
Ahí va… Sale un bizcocho para tres personas.
Un plátano maduro.
Dos huevos.
120g de yogur griego (aconsejamos con sabor a limón, aunque tenga un poco de azúcar).
80 g de almendras molidas.
Una pica de sal.
Nueces, semillas de calabaza, chía y pasas para adornar (un puñado).
Un cucharadita de canela.
Medio sobre de levadura.
Proteínas, frutos secos, yogur…¿Qué más queremos?
Ponemos el horno a 180 grados y vamos mezclando los ingredientes. Este bizcocho se hace prácticamente solo, simplemente hay que mezclar siguiendo un orden lógico.
Aplastamos el plátano con un tenedor, añadimos los huevos batidos y el yogur. Añadimos la almendra, la canela, la pizca de sal y la levadura. Removemos bien y vertimos la masa en un molde no muy grande. Añadimos los frutos secos para adornar y ya tenemos nuestro desayuno/merienda listo. 15 minutos en el horno, desmoldamos, dejamos enfriar y LISTO. Rico y sano para todos . Y para los golosos que no pueden prescindir del azúcar, podéis poner un poco de mermelada casera .
A disfrutarrrrrrrrrr.