Posiblemente la mejor empanada de bonito con tomate y huevo duro del mundo

Hemos hecho muchas empanadas, pero como esta, ninguna. La masa está crujiente y el interior es abundante y muy rico. Para los amantes de la empanada tradicional, tenemos que decir que esta NO lleva pimientos. Ni es de pan, ni es de hojaldre. El secreto está en la masa y en los ingredientes, que son ricos y, sobre todo, abundantes. No nos gustan las empanadas que tienen poco relleno y mucha masa. A por ella…


Ingredientes para diez/ doce personas.
Para la masa de la empanada

  • 500 g de harina de trigo y un poco más para amasar. (harina de repostería, harina floja, harina de trigo de todo uso). No sirve la harina de hacer pan.
  • 150 g de aceite de oliva
  • 150 g de leche
  • 1 huevo
  • 8 g de sal.

Para el relleno

  • 4 cebollas medianas
  • 400 g de atún escurrido
  • 4 huevos cocidos
  • 6 cucharadas de salsa de tomate
  • 1 cayena (opcional)
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal


Para la decoración final

  • 1 huevo batido

Procedemos lentamente y con mucho cariño, como siempre que queremos que algo nos salga bien.
Masa
Se preparan los ingredientes, se pesan y se disponen alrededor del cuenco en el que se va a preparar la masa.
Volcamos la harina en el cuenco, añadimos la sal, el aceite y el huevo.
Con una mano sujetamos el cuenco y con la otra mezclamos los ingredientes con la cuchara de madera hasta conseguir que ligue. Volcamos la masa en la encimera y formamos una bola (se hace enseguida); la dejamos en el cuenco cubierta con un paño durante 15 minutos. Cuando el relleno esté listo, la masa ya estará lista también.
Relleno
Cocemos los huevos, cuando estén fríos los pelamos, los picamos finos y reservamos.
Cortamos las cebollas en gajos finos y la sofreímos en 4 cucharadas de aceite a fuego medio y con una pizca de sal.
Cuando esté lista, añadimos las seis cucharadas de salsa de tomate y la cayena. Tapamos y dejamos cocer todo junto unos 5 minutos a fuego medio-bajo.
Volcamos el atún escurrido del aceite en un colador de malla a fin de que suelte la mayor parte del aceite posible.
Estiramos una parte de la masa y cubrimos la base de un molde forrado de papel de hornear.
Extendemos la cebolla de modo uniforme, ponemos parte del huevo, extendemos el atún y ponemos el resto del huevo.
Ponemos la otra mitad de la masa por encima, le hacemos un pequeño agujero en el centro (para que salga el vapor) y pintamos con huevo batido.

Horneamos a 195º con calor arriba y abajo entre 40y 50 minutos o hasta que la veamos doradita.

Y recuerda:

NO PUEDES

HACER FELIZ A TODO EL MUNDO…

NO ERES UNA EMPANADA

Caponata siciliana remodelada a nuestro gusto rico y fresco

Caponata, buen queso y una buena sidra.

Queridos seguidores, traemos hoy por vez primera un plato con berenjenas. Si os gustan, os encantará el plato y si no sois muy fans, siempre podéis iniciaros en nuevos sabores mediterráneos y probar algo distinto. A los vegetarianos os encantará y a los amantes de lo súper sano y las verduritas también. Ahí va nuestra receta de la semana.

Ingredientes

  • 2 berenjenas.
  • 1 cebolla pequeña.
  • 450 gramos de passata de tomate.
  • 125 g. de aceitunas en rodajas.
  • 3 cucharadas de alcaparras.
  • 50 gramos de piñones.
  • 2 cucharadas de vinagre.
  • 4 cucharaditas de azúcar morena.
  • Aceite de oliva virgen extra.

La passata es una salsa de tomate italiana muy concentrada. Si no la encontráis en vuestro súper, es muy sencilla de hacer. Compráis 1 lata de tomate triturado de unos 900g y la echáis en un colador grande. Descartáis el líquido que sale y lo que os queda en el colador es una passata casera más que aceptable.

Para empezar cortamos las berenjenas en trozos grandes, las salamos abundantemente y luego las ponemos en un colador durante una horas para quitarles el amargor. Las aclaramos y las secamos bien. Entonces las freímos en abundante aceite hasta que veamos que están blandas, las sacamos de la sartén y las reservamos.

Mientras tanto picamos la cebolla fina y la sofreímos en un poco de aceite. Cuando esté blanda le añadimos la passata y dejamos que se mezclen bien los sabores unos minutos.

Añadimos las berenjenas reservadas, las aceitunas en rodajas, las alcaparras, los piñones, el vinagre y el azúcar. Lo mezclamos bien todo y lo probamos para ver si tiene el punto que nos satisfaga de sal, de azúcar y de vinagre. Lo dejamos hacer unos 10-15 minutos a fuego suave y el el último minuto, si os gusta su sabor, echáis unas hojas de albahaca.

Este es un plato que se puede servir caliente, templado o frío, también como entrante o como guarnición de un pescado al horno. O con tortilla de patata, con patatas asadas, con carnes a la plancha…con arroz blanco. Un descubrimiento culinario que no deberíais perderos.

Y como decía el gran escritor y gourmet Manuel Vázquez Montalbán:

“El único producto mediterráneo realmente uniformador, y quizá algún día unificador, es la presencia de la berenjena en todas las culturas culinarias, de Siria a Murcia, de Viareggio a Túnez.”

Tarta Tatin especial para urgencias y momentos imprevistos

  • 1 lamina de hojaldre de mantequilla
  • 1 kilo de manzanas de tamaño pequeño
  • 200 gramos de azúcar
  • 75 gramos de mantequilla

¿Qué pasa cuando de repente te invitan a cenar y te dicen que si llevas el postre? ¿Que haces cuando quieres llevar algo casero y no hay tiempo para experimentos? Pues esta tarta Tatin da el pego y permite hacer algo rico en un pis pas. Todos sabemos que la masa brie no es muy pesada de hacer, al contrario del hojaldre que es muy laborioso, pero cuando el tiempo apremia, pues tiramos de la ayuda exterior.

Procedemos:

Pelamos y cortamos las manzanas en cuartos. En una sartén o cazuela de unos 24 cm y que podamos llevar al horno, hacemos un caramelo suave con el azúcar y la mantequilla hasta que se vuelva marrón claro. Añadimos la manzana y cocemos todo 20 minutos a fuego suave. Dejamos reposar media hora hasta que se enfríe. En ese tiempo podemos pasar la aspiradora, tender la ropa y hasta fregotear en la cocina.

Pasado ese tiempo extendemos la masa de hojaldre, recortamos un círculo un poco mayor que la cazuela y lo pinchamos con un tenedor para que no suba. La ponemos sobre las manzanas y remetemos los bordes. Cocemos unos 25 minutos,en el horno previamente precalentado hasta que veamos el hojaldre dorado.

Dejamos templar y le damos la vuelta a la tarta en una bandeja antes de servir.

Y tachín, aquí tenemos nuestra particular versión de la tarta Tatin.

Para los que no sabéis la historia de la tarta Tatin, ahí va:

La célebre tarta Tatin es el resultado de que las hermanas de este nombre, que regentaban un restaurante de cazadores, se olvidaron de poner la masa en la tarta de manzana que horneaban: sólo habían puesto en el molde las manzanas y el azúcar. Así que decidieron colocarla encima y tenerla un rato más en el horno: el improvisado arreglo fue un éxito.

Blanca coliflor con pisto y langostinos para primer plato fresco y suculento.

Hola queridos seguidores: hoy traemos un plato super sano para los amantes de las verduritas y especialmente de esas coliflores blancas blancas que tan sanas son.

Ahi va la receta

Para tres/ cuatro personas:

  • Una coliflor pequeña
  • Un ajo puerro
  • Cuatro zanahorias
  • Un calabacín grande
  • Uno/dos dientes de ajo
  • Una cebolla normal
  • Un pimiento rojo pequeño
  • Aceite de oliva virgen
  • Los langostinos que queráis. En este caso pusimos media docena.

Como a cada uno le gustará más una verdurita que otra, podéis poner más ajo puerro o más calabacín y menos zanahoria o viceversa. Que cada uno se sienta libre de modificar el pisto poniéndole picante, por ejemplo. Nosotros somos súper fans de la cayena, así que ponemos en abundancia.

En una sartén honda con tapa de cristal (o en un Wok) ponemos el ajo y la cebolla picadas muy finas, junto con el ajo puerro y dejamos que se haga muy despacio. Cuando esté listo lo sacamos y reservamos. Ponemos de nuevo en la sartén el pimiento crudo (previamente le quitamos la piel con un pelador) las zanahorias y el calabacín . Nosotros “tajamos» el calabacín con un aparato que se puede comprar en cualquier ferretería. Se hace antes y queda muy mono en el plato. Cuando todo esto esté listo en la sartén se mezcla con lo anterior y ya tenemos el pisto.

En una olla aparte hacemos la coliflor al vapor en tres minutos.

Voila. Se emplata y se colocan los langostinos y ya tenéis un plato mega rico y sano y con pocas calorías y mucho sabor a huerta.

Y como decía el gran Mark Twain:

«La coliflor no es más que la col con una educación universitaria»

Ensalada tibia de calabaza con queso francés y otras cosillas

Ensalada de calabaza.

Hola queridos fans: después de un pequeño paréntesis volvemos a la carga con nuevas y suculentas recetas. Esperamos que resulten inspiradoras y que os resulten como siempre, ricas y frescas. Para empezar, hemos elegido un plato con calabaza, aprovechando la época, y lo hemos preparado en una ensalada tibia. Se hace en diez minutos, es muy completo y muy muy ligero.

Ingredientes para dos personas:

  • Media calabaza cacahuete.
  • Queso francés suave.
  • Cuatro nueces.
  • Dulce de membrillo.
  • Una cucharadita de sésamo.
  • Un chorro de aceite de oliva virgen extra del bueno.
  • Unas hojas de lechuga.
  • Sal y pimienta

Partimos la calabaza en rodajas, procurando no coger las de la parte más delgada y las ponemos en el microondas tres minutos a temperatura máxima. En una fuente ponemos unas hojas de lechuga y cuando las rodajas de calabaza estén tibias las colocamos encima. A continuación añadimos un poco de sal y pimienta y un chorro de aceite de oliva generoso. Colocamos encima unas tiras de queso rico, el membrillo y espolvoreamos una cucharada sopera de sésamo.

Este plato es rápido, sencillo y súper sano. Lo podéis utilizar como ensalada o como primer plato.

Os aseguramos que el contraste de sabores es muy agradable. Además utilizamos de calabaza de una manera distinta, ya que suele prepararse más en purés.

Hala, que el invierno está en pleno esplendor y cocinar eleva el ánimo y comer rico y sano también.

La frase de hoy es:

Pastel italiano de ciruelas rojas

Hemos sacado esta receta de una revista italiana que compramos hace dos años. La revista está llena de platos exquisitos que esperamos ir probando poco a poco. Ahora que la hemos sacado del armario no vamos a poder parar…
Para empezar aquí va la tarta de ciruelas rojas o si queréis decir el nombre original: torta morbida di prugne e mandorle.

Ingredientes para seis/ ocho personas:

  • 250 g de harina.
  • Medio kilo de ciruelas rojas que no estén demasiado maduras.
  • Tres huevos.
  • 150 g de azúcar.
  • 100 ml de leche.
  • 40 g de almendras fileteadas.
  • 100 g de mantequilla.
  • La ralladura de un limón.
  • Una bolsita de levadura.
  • Dos cucharadas de azúcar morena.
  • Una cucharadita de vainilla liquida(podéis poner azúcar avainillada o nada, como decidáis).

Primero, hemos de decir que es muy importante que la mantequilla se derrita por sus propios medios, así que en cuanto tengamos pensado hacer la tarta, la sacamos de la nevera para que se vaya deshaciendo. Lavamos las ciruelas, les quitamos la pepita y las cortamos en trocitos a la larga.
Ponemos los tres huevos con el azúcar y batimos con unas varillas o un robot hasta que los montemos, añadimos la harina tamizada con la levadura y a continuación ponemos la mantequilla blanda o ya derretida y la leche.
Aromatizamos con una cucharadita de vainilla liquida y la ralladura de limón. Mezclamos todo bien con la espátula con movimientos envolventes.
Una vez que tenemos la masa en un molde redondo, ponemos las ciruelas en forma circular de manera que llenen toda la masa. Echamos por encima las almendras laminadas y espolvoreamos con el azúcar de caña.
Lo metemos en el horno previamente encendido a 180 grados durante una media hora o un poco más.
El resultado es un bizcocho súper suave con un contraste perfecto con las ciruelas. Nosotros además lo servimos con un puré fino que hicimos con ciruelas muy maduras y un poco de manzana
Prometemos que si lo probáis, repetiréis.

Y la frase de la semana es un haiku de uno de los mejores poetas japoneses:

“El halo de la luna. ¿No es el perfume de la flor del ciruelo que subió hasta allá?”

Yosa Buson

Espaguetis con sardinas al más puro estilo siciliano

Si os gusta la pasta, este es un plato distinto, delicioso y muy nutritivo. Lo probamos en Sicilia y hemos hecho una interpretación con nuestro toque especial de la casa. Con una copa de vino bueno y unos amigos os podrá llevar a un estado de alegría mediterránea nada desdeñable. ¡Viva la vita!

Ingredientes para seis/siete personas:

  • Medio kilo de espaguetis
  • Cuatro latas de sardinillas en aceite de oliva
  • 125 g de tomatitos Cherry
  • Un trozo de queso Parmesano como de 100g (se sirve aparte rallado como algo opcional)
  • Un diente de ajo
  • Una cebolla pequeña
  • Una cayena, sal rosa y aceite de oliva virgen extra para freír el ajo y la cebolla
  • Tres cucharadas soperas de alcaparras
  • Tres cucharadas soperas de pasas sin pepita
  • Tres cucharadas soperas de piñones
  • Unas hojas frescas de albahaca para adornar
  • Un sobre de azafrán
  • Pimienta negra

A ello:
En un bol ponemos las sardinas (sin el aceite de la lata y partidas por la mitad).
Preparamos la pasta y reservamos. Como más rica y más digestiva está la pasta es al dente, si el sobre dice ocho minutos, sacarlo en el minuto siete. Ya veréis que diferencia
En una sartén freímos el ajo, la cebolla, la cayena y los tomates Cherry. Cuando esté bien frito, añadimos las alcaparras, los piñones y las pasas y finalmente añadimos la pasta. Revolvemos en movimientos lentos con una cuchara de madera.
Ojo con las alcaparras. Nosotros las trajimos en salazón de Sicilia pero aquí es muy raro encontrarlas; antes de añadirlas, nosotros las ponemos en un colador y las pasamos por agua para que pierdan un poco el sabor excesivamente salado y avinagrado que tienen. Pero eso es opcional.
Finalmente, sazonamos con el sobre de azafrán y la pimienta negra al gusto. Adornamos con hojitas de albahaca y … ¡Ecco, questo e un piato maraviglioso!
La comida italiana, por esa mezcla de queso, tomate, albahaca y picante, tiene un efecto demostrado contra días melancólicos o aburridos. Un día de esos invitáis a cuatro amigos a comer y ya veréis el antes y el después. Además este plato es súper completo, tiene proteínas, frutos secos, verdura y carbohidratos. Y Parmesano, que nos encanta.
Viva la dieta mediterránea.
A disfrutarrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr.

Frase del día: como dice uno de nuestros grandes cocineros:

«Una buena sardina es mejor que una mala langosta»

Ferrán Adrià

Bavarois de chocolate y café

Si os gusta el café, el chocolate y el flan, este postre os va a encantar; queda muy suave y muy ligero, una mezcla de mousse y flan. Ahora para el verano es una estupenda opción, servido muy frío es una alternativa al helado y muy muy saboroso

Ingredientes para ocho personas

  • 150 g. de chocolate negro.
  • 400 ml. de leche.
  • 150 ml de nata para montar.
  • 50 ml. de café (con o sin cafeína, como queráis).
  • 50 ml. de Pedro Ximénez.
  • 100 g. de azúcar.
  • Tres huevos.
  • Cinco hojas de gelatina.
  • Una cucharadita de Maizena.
  • Azúcar caramelizada.

Procedemos.
Fundimos el chocolate troceado en la leche.
Separamos las tres yemas de las claras y las mezclamos con la mitad del azúcar. Lo juntamos con el chocolate derretido y añadimos la maizena desleída en un poco de agua.

Ponemos todo al baño María para que vaya espesando lentamente.

En un cazo ponemos el agua indicada y el café soluble y cuando todo esté caliente ( no dejéis que hierva) agregáis la gelatina que previamente pasamos por agua fría para que se disuelva.
Cuando esta mezcla esté lista, la añadimos al chocolate, agregamos el vino y la nata que previamente montamos.
Dejamos que enfríe todo unas dos horas.

Ahora solo nos queda poner las tres claras a punto de nieve con lo que queda del azúcar (50g.) e incorporar lentamente a la crema ya tibia.
Ponemos en un molde de silicona unos chorritos de azucar caramelizada y añadimos la crema de chocolate.
Metemos en la nevera, a ser posible toda la noche.
Y voila, rico, fresco y una alternativa a postres con harinas menos apropiados para días calurosos.
Y sin horno. Solo una batidora de varillas para montar las claras y la nata.

Y ahora la frase de la semana.

Deliciosos y suaves buñuelos de bacalao y queso Parmesano

Queridos fans: nunca habíamos hecho buñuelos y no nos arrepentimos del resultado. Nos han quedado suaves, cremosos y súper ricos. Teníamos nuestras reservas sobre el resultado final, pero os podemos decir que como aperitivo están muy buenos y se tarda mucho menos en hacerlos que las croquetas

Ingredientes para veinte buñuelos: ( seis/ siete personas)

  • 80g de Parmesano rallado
  • 250g de bacalao desalado
  • 100g de harina
  • 2 huevos
  • una cucharada rasa de mantequilla
  • 100 ml de agua
  • Aceite, sal, pimienta y nuez moscada
  • Para decorar perejil, limón y si tenéis a tiro un poco de lechuga también vale.

Al tema:

Ponemos en un cazo el agua y la mantequilla. Cuando empiece a hervir lo retiramos y añadimos la harina; removemos con energía y lo ponemos otra vez al fuego sin dejar de remover y lo dejamos un rato hasta que la pasta se despegue del cazo.
Cuando la masa esté tibia añadimos uno a uno los huevos enteros (sin haberlos batido) y lo mezclamos todo con movimientos envolventes.
Añadimos el queso rallado y el bacalao cortado en trocitos, la sal, la pimienta y nuez moscada a voluntad y esperamos a que enfríe la masa.
Finalmente ponemos aceite de oliva en una sartén y cuando esté caliente vamos poniendo pequeñas porciones de masa con ayuda de dos cucharas: Cuando estén dorados los sacamos, ponemos en papel de cocina y servimos bien calientes.
Una forma de presentación muy coqueta es poniendo lechuga picada muy fina en el plato.
Nosotros pusimos limón, pero también se puede poner mayonesa, perejil…
Lo bueno de esta masa es que la podéis hacer por la noche, dejar en la nevera con un film y freírlas al día siguiente.
Rico, nutritivo y distinto.

A disfrutarrrrrrrrrrrrrr,

La frase de hoy es:

Ensalada americana con salmón salvaje al toque especial de la casa


Hola, queridos fans, Hoy os ofrecemos una ensalada americana totalmente distinta. Le hemos añadido salmón salvaje y un montón de cosas más y nos ha encantado. Este salmón se vende congelado y se caracteriza porque tiene un color rosa pálido, es más ligero y también mas fácil de digerir. Es una ensalada rica y fresca por los ingredientes y una variación interesante ya que la ensalada americana solo lleva dos ingredientes, más la salsa y esta es súper nutritiva.
De los mares del norte al congelador y luego para casita, que está muy bueno.

Ingredientes para cuatro personas:

  • La mitad de un repollo pequeño.
  • Dos zanahorias.
  • Una manzana pequeña.
  • 250g de salmón salvaje congelado.
  • Dos cucharadas de aceitunas .
  • dos cucharadas de pasas.
  • Un yogur natural.
  • Una cucharada de azúcar moreno.
  • Una cucharadita de sal.
  • Una cucharada de vinagre.
  • una cucharada de mostaza.
  • dos/tres cucharadas de mayonesa.
  • Pimienta negra a discreción.

Ahí vamos:
Ponemos el salmón descongelado en una sartén para que se haga a la plancha y cuando esté listo y templado,le quitamos la piel y lo hacemos migas con las manos
Cogemos la col y la cortamos muy fina, luego limpiamos las zanahorias y las rallamos. En un bol mezclamos todos los ingredientes restantes (menos las aceitunas, las pasas y la manzana cortada en cuadraditos) para hacer una salsa fina.
Cuando tengamos la salsa, ponemos la col, la zanahoria, mezclamos bien y añadimos el salmón, la manzana, y decoramos con las pasas y las aceitunas.
Todo para la nevera y ya tenéis una ensalada con omega 3, verdura, fruta, lácteos y un sabor súper sorprendente.
Si la dejáis en la nevera toda la noche mucho mejor porque se van mezclando los sabores y está más rica.
Como algo opcional, podéis añadir aceite de oliva virgen, mostaza con miel en vez de mostaza normal o si os gusta mucho la mayonesa, más cantidad.
Y si la metéis en un túper y en una nevera de playa y la coméis de pícnic….
Deliciosa.

Y como frase del día una que nos gustó mucho.